Antes de abrir tu cafetería: ¿Estás listo de verdad?
Si estás considerando abrir una cafetería, antes de pensar en el local o la máquina de espresso, hay una pregunta que debes hacerte: ¿por qué quieres hacerlo?
Gilberto Pérez Castillo
9/21/20252 min read


Antes de abrir tu cafetería: ¿Estás listo de verdad?
Por Gilberto Pérez Castillo
Si estás considerando abrir una cafetería, antes de pensar en el local o la máquina de espresso, hay una pregunta que debes hacerte: ¿por qué quieres hacerlo?
Sí, así de simple. Porque antes de emprender, necesitas mirar hacia adentro. Te lo digo como alguien que ha operado más de 10 cafeterías propias: el café puede ser una pasión… pero abrir un negocio requiere mucho más que amor por la bebida.
1. La verdadera motivación: ¿es pasión o solo una moda?
Muchas personas se enamoran de la idea romántica de tener una cafetería. Pero este negocio no es solo servir cappuccinos bonitos. Es operar equipos, entrenar gente, resolver problemas… y sí, también vivir días muy duros.
Pregúntate: ¿tienes un vínculo real con el café y la comunidad que quieres construir? ¿O estás buscando solo una salida laboral con estética “instagrameable”? La diferencia entre una cafetería que resiste y una que cierra en el primer año está en esa respuesta.
2. ¿Tienes lo que se necesita para liderar?
No necesitas saberlo todo. Pero sí necesitas tener claridad sobre tus habilidades actuales y tus áreas de mejora.
¿Sabes administrar inventarios, costos y personal?
¿Tienes empatía para atender clientes enojados?
¿Te gusta resolver imprevistos todos los días?
Haz una lista realista. No para desanimarte, sino para planear cómo vas a formarte, capacitar a tu equipo o buscar aliados.
3. Visualiza el éxito con metas reales
Antes de hablar de expansión o franquicias, necesitas tener metas claras:
¿Cuándo vas a abrir?
¿Cuál es tu inversión máxima?
¿Cuántos cafés al día necesitas vender para sobrevivir?
Y más allá de los números: ¿cómo sabrás si tu cafetería está cumpliendo su propósito? ¿Te ves en esto en 5 o 10 años?
Tener una visión a largo plazo evita que tomes decisiones reactivas o sin estrategia.
4. Reconoce tus límites… y prepárate para enfrentarlos
Muchos negocios fracasan porque sus fundadores sobreestimaron lo que podían hacer solos o subestimaron el capital necesario.
Sé honesto: ¿cuánto puedes invertir sin poner en riesgo tu estabilidad? ¿Qué conocimientos necesitas adquirir ya mismo? ¿Quién puede ayudarte desde el día uno?
Pedir ayuda no es signo de debilidad. Es signo de liderazgo consciente.
5. Redefine qué significa “tener éxito”
El éxito no es solo dinero. También es construir comunidad, formar equipos, disfrutar lo que haces y mantenerte fiel a tus valores.
Haz tu propia definición de éxito. Escríbela. Revísala cada mes. Porque esa claridad será tu brújula cuando las cosas se pongan difíciles (y créeme, se pondrán).
Antes del espresso, el espejo
Antes de elegir el nombre de tu cafetería, mírate al espejo. Lo que encuentres ahí será tu mayor herramienta o tu mayor obstáculo.
Haz esta autoevaluación con honestidad y visión. Tu cafetería necesita una base sólida, y esa base... eres tú.